La sociedad está tratando de mejorar las condiciones del planeta y la calidad de vida de las personas. Esto es una revolución en todos los sectores, principalmente en el de la construcción, donde podemos ver como la arquitectura sostenible tiene un peso esencial en todo el proceso para lograr reducir la contaminación y favorecer la eficiencia energética, entre otros de los objetivos que plantea.
En el artículo de hoy os queremos hablar del concepto de arquitectura sostenible, que cada vez está más demandada, y que ha supuesto un cambio en el paradigma de las personas a la hora de construir una casa.

¿Qué es la arquitectura sostenible?
La arquitectura sostenible se caracteriza por ser una construcción en la que se tiene en cuenta la importancia del cuidado medioambiental y todo lo sostenible. Así los arquitectos combinan las habilidades profesionales con materiales y edificios que traten de reducir el impacto ambiental causado por las personas.
Con esta idea los edificios consumen menos electricidad y las emisiones de carbono también se verán reducidas.
Dentro del diseño de arquitectura sostenible hay que tener en cuenta la calidad de vida, la calidad ambiental, la salud humana, la salud del edificio, la eficiencia energética y el costo.
¿Cómo se logra la arquitectura sostenible?
Para poder tener y llevar a cabo la arquitectura sostenible debemos realizar la inspección del sitio, determinando las condiciones naturales y las limitaciones que podemos encontrar.
En este paso habrá que verificar los requisitos y las regulaciones de las autoridades locales, así como reunirse con personas que sean relevantes para hablar sobre el proyecto.
A su vez, para lograr este tipo de arquitectura hay que pensar en la manera en la que se va a utilizar la energía en el edifico y conservarla de forma efectiva. Con este proceso se aseguran de que la construcción tenga un buen aislamiento, además de usar toldos y persianas como enfriadores de construcciones pasivas.
En cierta medida, las construcciones sostenibles dependen mucho de la energía solar y de otras fuentes de energía alternativa que existen.
Otro de los factores que se deben valorar para lograr la arquitectura sostenible es la eficiencia energética, por eso hay que emplear tanto técnicas pasivas como activas con el objetivo de reducir las necesidades energéticas del edificio e incrementar la capacidad de captar o generar su propia energía.
Con todo lo mencionado anteriormente, es vital que el edificio esté colocado de manera adecuada, y que se cree un diseño que funcione con el entorno natural y sus recursos, en vez de en contra de ellos. Esto se refiere por ejemplo a las ventajas y el tamaño de las habitaciones, que son fundamentales para asegurar esa eficiencia energética.
Elementos a tener en cuenta en la arquitectura sostenible
Para llevar a cabo la arquitectura sostenible debemos considerar varios elementos que son imprescindibles en todo el proceso:
- Iluminación natural: Es fundamental garantizar espacios que tengan una buena luz natural, para promover el ahorro energético. Además de que es una característica que valoran las personas porque favorece el bienestar y el confort.
- Tecnología de aprovechamiento: Uno de los objetivos de estos edificios es reducir el exceso de calefacción. Por eso con la simulación informática podemos hacer un análisis solar de las superficies para aprovechar al máximo el calor de la radiación.
- Edificios ECCN: Las fuentes renovables logran tener un consumo de energía casi nulo, y es lo que se da nombre a los edificios ECCN.
- Domótica: La tecnología es un hecho que no para de crecer en los últimos tiempos, y lo vemos en los hogares conectados y las casas inteligentes. Mediante la automatización conseguimos potenciar la gestión energética, la seguridad y el confort de la vivienda. Todas estas instalaciones deben cumplir la normativa y la calidad avalada por AENOR.
- Eliminar puentes térmicos: Son consideradas fugas de temperatura y por lo tanto se impide la eficiencia energética y la impermeabilidad. Para ello podemos encontrar técnicas de aislamiento con materiales térmicos.
- Jardines verticales: Además de ser un buen elemento decorativo, contribuyen a la recuperación ambiental y del entorno, fomentando en cierta manera el aislamiento porque cubre paredes, muros y fachadas.
- Reutilización de materiales: Hay que tratar de reducir al máximo el impacto del ser humano en el entorno, por eso el reciclaje de los materiales procedentes de la naturaleza y de los plásticos o aluminios es un pilar fundamental en todo esto.
A medida que se van construyendo casas y edificios, se trata de incorporar todas las ventajas y recursos que van a ofrecer una construcción de calidad y que sea respetuosa con el medio ambiente.
Por eso la arquitectura sostenible es un tipo de construcción que tiene más presencia en la sociedad con el objetivo de conseguir que todas las casas nuevas estén formadas por estas características y se cumpla tanto con la calidad de vida humana como la calidad ambiental.